Se debe formar un precedente y que de esta manera todas las entidades gubernamentales, no gubernamentales, la parte académica, unan todos los esfuerzos por consolidar una estrategia nacional, fuerte en la atención del componente estomatognático en pacientes VIH positivo o en pacientes con SIDA y de esta manera promover la comunicación eficaz entre la medicina y la odontología.
Se torna también imperante la idea de establecer un trabajo sinérgico y efectivo entre todas las partes, esto con el fin de confrontar de manera más profunda este virus, dejar de hablar desde las suposiciones, dejar los miedos y que se pueda hablar con certeza y con claridad sea del virus o de la enfermedad, que sin duda alguna requieran más odontólogos competentes, capacitados para ofrecer la mejor calidad de vida a la población afectada.