De las radiografías periapicales, retroalveolares o intraorales podemos hablar que hay varias técnicas, tenemos, así como tipos de películas:
Película número cero (0): se utiliza en niños menores de ocho (8) años.
Radiografía periapical o retroalveolar número uno (1): es una radiografía más pequeña de la que estamos acostumbrados en el medio y que se utiliza mucho en Europa para piezas individuales.
Periapical número dos (2): es la que normalmente todos conocemos y todos utilizamos en las series radiográficas es la de más uso,
Radiografía número tres (3): es una radiografía del mismo tamaño de la dos (2), pero un poco más larga que servía para tomar radiografías de aleta de mordida o coronales para tratar de tomar los tres (3) molares y los dos (2) premolares. Esta radiografía por las distorsiones y las sobreproyecciones en los espacios interproximales no se utiliza mucho.
Radiografía número cuatro (4) o radiografía oclusal: es una radiografía intraoral que cuando la utilizamos va a ser como una gran periapical que nos va a aumentar el área que podemos observar de estructuras anatómicas.
Dentro de las intraorales tenemos varias técnicas: la bisectriz, la del paralelismo, la de aleta de mordida o radiografías coronales, la técnica del ángulo bajo, la de le master y la de Donovan, ésas por mencionar las más comúnmente utilizadas en la especialidad. Básicamente la radiografía intraoral es la mejor radiografía que se puede obtener del cuerpo humano, porque es la que más se ajusta y cumple con las leyes de proyección, es la radiografía que menos distorsiones puede presentar cuando es tomada en forma adecuada, sin embargo, hay que aclarar que toda radiografía tiene algún grado de distorsión o de magnificación, vamos a ver todo lo que es la estructura dental con sus componentes, todo el tejido que la rodea, (tejido periodontal), incluyendo las estructuras óseas que la van a rodear y básicamente son muy importantes en el diagnóstico de caries y enfermedad periodontal, es para lo que más las estamos utilizando. Se utilizaban o todavía se utilizan mucho para ver la angulación de los terceros molares y cuando no teníamos la tomografía, porque ya cuando vamos a evaluar unos terceros molares, recurrimos más bien a la tomografía y podemos en un solo examen ver los cuatro (4) terceros molares.
Para ver piezas incluidas utilizábamos radiografías intraorales con una técnica que se llama técnica del deslizamiento, para esta técnica tomábamos tres (3) radiografías con angulaciones diferentes del tubo y dependiendo a dónde se corriera la pieza incluida o el objeto que estábamos estudiando, determinábamos si estaba por vestibular o por lingual. Hoy con la tomografía además de eso, podemos determinar las relaciones de las piezas incluidas o de los supernumerarios con estructuras anatómicas vecinas o determinar si ha habido daño sobre las raíces de las piezas vecinas.
Lo otro es en su utilización para el diagnóstico temprano de la enfermedad periodontal, nos va a permitir determinar la pérdida de las crestas óseas interproximales, la limitación es que no podemos saber qué pérdida ósea ha habido en la tabla vestibular o en la tabla ósea lingual, esto hoy en día estamos empezando a hacer diagnósticos tridimensionales en periodoncia a partir de tomografía Cone Beam, sin embargo, estas intraorales son las que durante toda la historia de la odontología a partir de que se descubrieron los rayos x hemos utilizado para el diagnóstico temprano y después el diagnóstico de enfermedades periodontales avanzadas también.
Ayuda también en el diagnóstico y en el tratamiento en endodoncia para determinar las lesiones periapicales, periodontitis apicales, quistes radiculares, granulomas apicales, fracturas radiculares, fracturas dentales en la parte de coronas, etc.