Hoy vamos a hablar de la diferencia entre los exámenes de tomografía computarizada y resonancia magnética.
La tomografía computarizada y la tomografía cone beam que estamos utilizando en odontología, aunque tienen una diferencia en la forma de la adquisición de las imágenes, son tomografías computarizadas. La resonancia magnética es otro tipo de examen: vamos a hablar primero de la tomografía.
La tomografía es un examen radiográfico porque sigue utilizando rayos x para la obtención del mismo, la diferencia es que al tomógrafo se le agregó un computador el cual es capaz de hacer cortes multiplanares como los cortes anatómicos: sagital, axial y cortes coronales, estos tres cortes se pueden mezclar y hacer otra cantidad de cortes en cualquier dirección del plano equis (x) ye (y), además, puede hacer imágenes en 3D, pero se utiliza radiación. Como en toda la radiografía su mayor rendimiento es en los tejidos duros (sea para los dientes o para el hueso) cuando no, es posible ayudarse de medios de contraste para poder dibujar otras estructuras o ver infiltración en otras estructuras, por ejemplo, de lesiones tumorales.
La resonancia magnética aparece diez años después que la tomografía (para principios de los años ochenta), es un concepto totalmente diferente en el que no se utiliza radiación, se utiliza un campo magnético que es mucho mayor que el campo magnético que ejerce la tierra en la atracción de los cuerpos hacia ella. En resonancia se trabajan con equipos de 0.5 teslas, 1 tesla y de 1.5 que son los más modernos y los que se están utilizando más en la parte diagnóstica en este momento. Hay otros resonadores de 3 tesla, pero estos están siendo utilizados casi que exclusivamente, en investigación.
Hablar de la forma cómo se logra obtener es bastante extenso, vamos a simplificar y a decir que el paciente es colocado dentro de un túnel donde hay un gran campo magnético y se emiten unas ondas de radio, estas van a alterar la posición de los protones dentro de nuestras estructuras (lo que más tenemos nosotros es hidrógeno porque somos casi 80% agua y el agua es h2o), al alterarse esos protones del hidrógeno, cuando se activa el campo magnético o cuando se neutraliza, tratan de volver a su posición o de relajarse; en esos momentos las antenas que tiene el paciente alrededor, van a tomar una información que va a pasarse a un computador y se va a convertir en imágenes; lo que más está captando es los protones de hidrógeno, por tanto, los que más tienen hidrógeno son los tejidos blandos y esta es la razón de que la resonancia magnética su mayor rendimiento sea en los tejidos blandos. En odontología la estamos utilizando mucho en la articulación temporomandibular para ver el desplazamiento del disco articular que está ubicado entre la fosa del temporal y el cóndilo, también se puede usar para estudios de glándulas salivales para lesiones tumorales en tejidos blandos e incluso lesiones tumorales en tejidos duros.
La odontología se salió de tomar únicamente las pequeñas radiografías intraorales ya tenemos una gama de exámenes muy grandes y entre ellos tenemos la tomografía y la resonancia magnética.